Los confesamos, estamos locos por el pan. Y por eso nos gusta perfeccionarnos en el conocimiento sobre este sencillo y milenario manjar, descubriendo los avances, las nuevas técnicas y las tendencias que se desarrollan a nivel internacional. Cuanto más nos especializamos, más capacidad tenemos de generar innovación y de aportar nuestras propias ideas.
De ahí que hayamos buscado siempre las vías para ampliar nuestros conocimientos, y qué mejor forma de hacerlo que de la mano de dos verdaderas autoridades del mundo del pan como son Innopan, el centro tecnológico del pan referente a nivel estatal y AIB International, entidad norteamericana que desde 1919 está dedicada a la investigación y la seguridad de los alimentos a nivel mundial.Desde hace unos meses nos hemos incorporado al programa que ambas entidades han puesto en marcha para la obtención del Certificado de Panificación de AIB Internacional. Es un programa intenso, que consta de 5 módulos formativos durante los que se profundiza en cada una de las fases del proceso de elaboración del pan. Todo un master en panadería que está significando una vuelta a las aulas y los exámenes, porque el nivel de exigencia es elevado.A estas alturas, hemos pasado el ecuador del programa con muy buenas sensaciones. Hemos aprendido nuevos secretos de las masas madre, formulación, horneados y mezclas de cereales o tipos y posibilidades de combinación de harinas. Y tan interesante como las clases está siendo el intercambio de experiencias e ideas con los compañeros. Pero aún nos queda, porque el curso no ha terminado y después de las vacaciones lo retomaremos para realizar los siguientes módulo.El aprovechamiento de las clases es total, porque todos los conocimientos vamos adquiriendo se están traduciendo de forma práctica a nuestro trabajo diario en el obrador, perfilando técnicas, valorando nuevos ingredientes y con muchas, muchas ideas que vamos poniendo en marcha. Todas ellas con el único objetivo de que el consumidor disfrute aún más de nuestra variedad de panes.