Lorenzini, empresa chilena de seguridad vial, va a comercializar en Chile el radar aforador Metis, una solución para aumentar la seguridad vial desarrollada por la división de gestión de tráfico de Lacroix Señalización.
Se trata de un radar aforador preventivo, orientado a la sensibilización, que indica a los conductores la velocidad real a la que circulan, con el ánimo de concienciar si se superan los límites de la vía. Físicamente es una mezcla entre una señal de código y un marcador numérico luminoso que muestra de forma muy visual la velocidad real de circulación del vehículo.
Además, Métis registra y almacena gran cantidad de datos que resultan muy útiles para las administraciones públicas y que permite a los técnicos de tráfico conocer el comportamiento de los conductores en las vías y basar sus informes técnicos en datos fiables. A través de su software se pueden visualizar datos, estadísticas y gráficas sobre las velocidades de los vehículos, así como crear informes de análisis de la circulación para conocer el nº de vehículos al día, por franja horaria; el umbral de velocidad, la velocidad media de circulación y la velocidad máxima, sin necesidad de un experto.
Tiene una aplicación muy interesante en zonas donde es imprescindible respetar el límite de velocidad establecida, como las zonas escolares, en la proximidad de pasos de cebra, áreas muy transitadas, etcétera.
Por su carácter innovador y preventivo, el radar aforador Metis cuenta con grandes expectativas de comercialización en Chile, un mercado que conoce en profundidad Lorenzini. La empresa cuenta con más de 60 años de actividad especializada en el mundo de la seguridad vial, guiándose por su vocación hacia el producto tecnológico y de alto valor añadido. De este enfoque nace su apuesta por llevar el radar aforador Metis al mercado Chileno como una solución de vanguardia que permite dar pasos en la seguridad de las vías locales.
Tecnología y funcionalidad
El radar aforador Metis cuenta con unas características tecnológicas que le aportan una gran funcionalidad y robustez al conjunto. Tiene una gran visibilidad, tanto de noche como en condiciones de mal tiempo y está diseñado para que el conductor perciba primero el indicador de velocidad, luego la señal retrorreflectante y después el mensaje texto.
Entre las ventajas de este radar aforador se encuentran también una reducción notable en el coste habitual de este equipamiento, ya que supone menos de la mitad que los radares convencionales. Otra de las ventajas es su rápida colocación, con un sistema de instalación análogo al de una señal de tráfico convencional. Además, para adaptarse a las necesidades de diferentes emplazamientos, este radar aforador informativo está disponible en tres tamaños distintos, para usos urbanos, en carretera o en autovía.
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