El premio ‘Innovación Empresarial’ distingue a VIVEbiotech; el ‘Made in Euskadi’, a Lointek y la ‘Euskal Makila’, a Protec Arisawa Europe
La XXXII edición de La Noche de la Empresa Vasca, organizada por la Fundación Empresa Vasca y Sociedad/Gizarte eta Euskal Enpresa Fundazioa con el patrocinio de Kutxabank, el apoyo de las empresas Dinof e Inbisa y la participación de Cope como medio colaborador, ha distinguido la trayectoria empresarial de Leire Alberdi Olavegoya, CEO de Grupo Alberdi como ‘Mejor Empresario Vasco 2022’.
El Jurado de los premios también destacó el trabajo de Lointek con el premio Made in Euskadi, por el impacto internacional de su proyecto; y de VIVEbiotech con el galardón Innovación Empresarial, por su modelo de gestión para impulsar la nueva industria de la biotecnología. La ‘Euskal Makila’ se entregó a Protec Arisawa Europe, que hace trece años integró al fabricante vizcaíno de cajas a presión FRP, compañía fundada en 1971.
Las distinciones fueron entregadas por los ganadores de la edición anterior. Mariano Ucar Angulo, presidente ejecutivo de Faes Farma, entregó a Leire Alberdi la placa que la reconoce como ‘Mejor Empresario Vasco 2022. Asier Alea, director de desarrollo global de Basque Culinary Center, traspasó el galardón Made in Euskadi a Serafín Loroño, CEO de Lointek, y Lorenzo Mendieta, director general de Alcorta Forging Group, cedió el testigo de la Innovación Empresarial a Gurutz Linazasoro, presidente de VIVEbiotech.
El acto del Guggenheim se abrió con la intervención de Eduardo Ruiz de Gordejuela, consejero delegado de Kutxabank, y se cerró con el otorgamiento de la ‘Euskal Makila’ a la multinacional japonesa Arisawa, que estuvo representada por el director general de su filial vizcaína, Gonzalo Ortega, que recibió la distinción de manos de la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno Vasco, Arantxa Tapia, que se encargó de clausurar el evento.
Mejor Empresario Vasco: Leire Alberdi Olavegoya, CEO de Grupo Alberdi
La ingeniería aplicada a nuevos desafíos empresariales
Leire Alberdi es representante de una saga empresarial familiar, hija del difunto Jesús María Alberdi, fundador de Talleres Izurza, Sidepalsa, Diviprec, Aeromec y Legutilan, empresas que hoy conforman Grupo Alberdi. Nació en Durango en 1974 y estudió Ingeniería técnica en la Universidad del País Vasco. Nada más terminar los estudios empezó a trabajar en el departamento de I+D de Ormazabal y a finales de los 90 se incorporó a Diviprec, inicialmente en el área de producción, donde tras un periodo de adaptación asumió la gerencia en 2004. Para, diez años después, recoger el testigo de su progenitor al frente del grupo.
En la actualidad es CEO de un grupo formado por cinco empresas y seis plantas de producción pertenecientes a la familia Alberdi con actividades independientes que comparten sinergias desde el punto de vista comercial, focalizadas principalmente en los sectores de máquina herramienta y aeronáutica. Su pensamiento estratégico le ha llevado a “liderar con éxito procesos de desarrollo de negocio, digitalización, innovación y transformación cultural en todas las empresas”, reconoce la responsable.
La más antigua es Sidepalsa, creada en 1976 para el desarrollo de cambiadores automáticos de herramientas, cambiadores de pallets y sistemas de manipulación, y al final de la década surge Talleres Izurtza. Con dos plantas en Izurtza, Sidepalsa desarrolla equipos para el sector de Máquina Herramienta.
A ellas se les suma Diviprec (Berriz), focalizada en el mecanizado de superprecisión; y Aeromec (Iurreta), centrada en el mecanizado para la industria aeronáutica. El último activo es Legutilan, en cuyo centro productivo de Legutiano se realiza el mecanizado de grandes dimensiones.
La plantilla global de las cinco empresas asciende a 125 personas. El grupo facturó 35 millones de euros en 2022, y cuentan con una cartera de trabajo que mantiene sus plantas al 100 por ciento de su capacidad productiva. Por esa razón, en 2022 invirtieron cinco millones de euros en la incorporación de nuevos medios productivos en Diviprec, Aeromec y Sidepalsa que, de seguir vendiendo al ritmo actual, aún no serán suficientes para responder a la demanda creciente.
El 40 por ciento de la facturación de grupo Alberdi procede de los mercados exteriores, donde ha desplegado una red comercial con agentes distribuidos por varios países europeos, con Italia y Alemania a la cabeza; China, India, Canadá, Francia, Chequia y Estados Unidos.
“La sucesión en una empresa familiar es una cuestión extraordinariamente complicada”, señala, y LeireAlberdi ha conseguido “asegurarla continuidad del negocio evitando copiar patrones antiguos, creando un modelo de empresa diferente, donde cada persona encuentre su sitio”, subraya.
Su formación técnica y visión empresarial le ha permitido adoptar una ambiciosa estrategia comercial apoyada en la diversificación y en la internacionalización de las actividades principales de mecanizado (Diviprec y Aeromec), y de diseño y montaje de cambiadores de herramientas (Sidepalsa).
En esta línea, el crecimiento orgánico marca la dirección a seguir. Por esta razón reconocen que, si surgiera la oportunidad, no descartan la posibilidad de crear una nueva empresa. “Si hay necesidad, la propiedad tiene voluntad”.
Un mercado cada vez más exigente y cambiante les obliga a una intensificación de la actividad de I+D, así como a una constante actualización de sus medios productivos, en el que la sostenibilidad y la integración humana son pilares fundamentales.