Ayer, en el II Festival Vitaminas Anticrisis de Trapagaran, las personas mayores y sus valiosas aportaciones han sido los protagonistas de una tarde emocionante.
El evento ha comenzado muy alto, con el homenaje especial a D. Enrique Casado, conocido y reconocido médico del municipio, que recientemente ha cumplido los 100 años. Recogiendo el sentir de todo el pueblo, el Alcalde de Trapagaran le ha entregado una escultura exclusiva del artista Jon Alberdi forjada en hierro, un material que como ha señalado Xabier va unido a “la naturaleza, la forma de vida y el carácter de nuestra tierra”. El homenajeado ha recibido el reconocimiento con visible emoción: “vine a los 46 años a esta tierra pero soy y me siento de Trapagaran”
Posteriormente se ha hablado de algunas experiencias de crisis de las personas más veteranas del municipio, unos relatos que se están recogiendo en el blog www.vitaminasanticrisis.com y que dibujan parte de la memoria colectiva y de la historia local. Su objetivo es recoger las vivencias más críticas de los mayores como parte del patrimonio del municipio, ejemplo y ayuda para sus vecinos.
Con este festival se cierra en Trapagaran el programa Vitaminas Anticrisis, organizado por el Ayuntamiento de Trapagaran en colaboración con la Fundación Abuelo-a Actual-Gaurko Nagusia Fundazioa. José Antonio García Pedrosa, Concejal de Bienestar Social de Trapagaran, e Inés Venero, Presidenta de la Fundación Abuelo Actual – Gaurko Nagusia Fundazioa, han realizado un repaso por las distintas actividades que ha incluido. Como broche “de oro” se ha realizado un reconocimiento a las personas mayores que han aportado su relato de experiencia de crisis, entregándoles un detalle.
José Antonio García Pedrosa remarca la sensación de objetivos cumplidos de los organizadores, “el programa pretende promover la participación social de los mayores y el reconocimiento colectivo de sus contribuciones y es lo que se ha palpado esta tarde en el ambiente.”
El homenaje a los mayores ha tenido también un ámbito lúdico, ya que se ha plasmado en diversas actuaciones musicales, de la Escuela Municipal de Música, del grupo de poesía local Olerki Maitea, de cuencos tibetanos a cargo de Olga Sánchez, así como la magia del Mago Alfiz de Fábrica de Magos.